Diamantina
Todo pinta para que 2025 sea el año de los destilados mexicanos. Diamantina es un nuevo bar en la Roma del que, incluso si no acostumbres tomarlo, vas a salir amando el mezcal oaxaqueño. Su barra tiene etiquetas únicas y se armó con mucho cuidado directamente con los productores.
Expuestas en la barra verás botellas de Gran Minero, Cuish, La Medida, Agua de Sol, Mono de Calenda, entre muchas otras, cada una con la especificiación de variedad de agave, productor y poblado, pero si quieres saber algo más, pregúntale al equipo, que te hablará de mezcal toda la noche.
El diseño minimalista de paredes terrosas da una vibra calmada que invita a tomar tu mezcal, como debe ser, a besitos, saboreando su perfil sin apuro. Pero ojo, me aclaran que no son mezcalería, sin problema puedes perdir drinks clásicos como un negroni o un martini, pero te animo a que revises la coctelería de la casa, en especial si quieres mezcal pero no lo tomas solo. Dos buenos ejemplos son el tropical Costa Chica (espadín, puré de mango asado, cítricos y espuma de coco y agave) o el fresco y herbal Basilisco (espadín, shrub de pepino, toronja y albahaca).
La gran sorpresa de mi visita fue la comida. No hay más que decir que los platos se prepran con ingredientes oaxaqueños. Te firmo que vas a volver por sus esquites, calientitos, con el toque ahumado del maíz tatemado que empareja perfectamente tu mezcal, y rematados conchapulines, mayonesa, polvo de cacahuate y chiles. Otra joya para compratir son los kushi