Yo Tonya

Basada en una historia real –la peripecia de la patinadora Tonya Harding y sus problemas personales, que acabaron con su carrera–, 'Yo, Tonya' quiere ser a la vez un drama deportivo y una comedia negra, una mirada corrosiva a la América profunda y un comentario sarcástico en torno al mito del éxito. No lo consigue todo, claro, entre otras cosas porque Craig Gillespie ('Lars y una chica de verdad') se pierde en el laberinto de la propia puesta en escena, demasiado artificiosa como para pasar del falso documental al 'grand guignol' con la ligereza que quisiera. Sin embargo, tanto la interpretación de Margot Robbie como el tono salvaje y despiadado consiguen un implacable retrato de una cierta clase social condenada al fracaso y a la infelicidad.