Se necesita muy poco para hacer algo muy grande. Es lo que ha conseguido Celia Rico Clavellino con esta historia de una madre y una hija que escapa de cualquier lugar común. Solo necesita dos actrices en estado de gracia, un piso minúsculo, una cámara fluida y unos diálogos creíbles. La figura perfectamente dibujada en el primer plano del film, donde vemos las cabezas de Lola Dueñas y de Anna Castillo surgiendo de una manta que las une en un único ser, se va separando poco a poco para que cada una adquiera autonomía y libertad sin perder nunca el hilo que las liga, en el espacio vital de un hogar donde se teje el nuevo universo que construyen entre ambas.

Reseña
Viaje al cuarto de una madre
Time Out dice
Discover Time Out original video