Últimas días en la habana

Reseña

Últimos días en la Habana

3 de 5 estrellas
En el corazón de La Habana, Miguel sueña con obtener un visado que le permita huir a Nueva York. Paralelamente, Diego vive postrado e inmóvil por el sida.
  • Cine
  • Crítica de Time Out
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Time Out dice

Fernando Pérez ama La Habana y más aún ama a sus habitantes. Esto hace que su mirada sobre la realidad de la ciudad no caiga nunca en la sordidez. 'Últimos días en La Habana' es la historia de una amistad: la de dos hombres opuestos que viven juntos. Diego, homosexual y enfermo terminal de sida, irradia luz y alegría. Miguel, su amigo, es un heterosexual callado y cerrado, que cuida de él y se ocupa de todo mientras sueña en marcharse a los Estados Unidos. El escenario es una vieja casa ruinosa donde todo fluye gracias a la vitalidad de Diego y la mirada atenta de Miguel. El gran acierto de Pérez es mostrar un espacio que ha caído en la mayor decadencia física, mientras sus personajes mantienen intacta la dignidad.

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