Sin hijos

Reseña

Sin hijos

3 de 5 estrellas
  • Cine
  • Crítica de Time Out
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Time Out dice

Después de separarse de su mujer, Gabriel decide consagrarse a su hija Sofía. En otras palabras: deja de ser "hombre" para reciclarse simplemente en "padre". Esto cambia cuando se reencuentra con Vicky, su eterno amor platónico, que detesta a los niños, y al que habrá de ocultar la existencia de Sofía. 'Sin hijos' plantea la incómoda convivencia entre dos amores (el romántico y el paternal) como una comedia, donde Gabriel tendrá que hacer malabarismos para sostener el engaño en que se ha metido (el más efectivo visualmente, convertir un piso infestado de juguetes y dibujos en un minimalista apartamento de soltero cada vez que Vicky lo visita). Pero si el filme destaca por algo, es por Maribel Verdú, perfecta en las modulaciones cómicas y dramáticas de su personaje, contrastando la dureza de su acento madrileño con la dulce arena que remueve el habla de los actores argentinos.

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