[title]
Sólo Mel Gibson podría firmar un panfleto bélico ultraviolento en el que el héroe principal es un objetor de conciencia. En su regreso tras las cámaras, el cineasta parte de la historia real de Desmond Doss, un estudiante de medicina condecorado por salvar docenas de vidas en plena batalla de Okinawa sin disparar un tiro. En la primera mitad evoca el cine clásico para retratar a Doss como la encarnación de las esencias de una América profunda tan ingenua como religiosa. El segmento central, el más interesante, muestra el conflicto de este soldado pacifista en un ejército donde no encaja. Es en el campo de batalla donde el director se muestra más cómodo y hace confluir sus dos debilidades: la religiosidad radical obra milagros en plena masacre. Gibson rueda con convicción esta patriótica vida de santo. Un drama bélico.