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Todos los que salen en esta versión de 'Los vigilantes de la playa' tienen pinta de pasárselo muy bien. Y no podía ser de otra manera. Seth Gordon nos sirve una parodia terriblemente divertida, y a la vez sutil, donde Dwayne Johnson vestido de socorrista sale del agua en slow motion tras rescatar a un hombre que se ha accidentado haciendo parapente, multiplicando esa estética musculosa de David Hasselhoff en la serie los 90, y justificando la propuesta con una escenificación obvia del referente.
El principal atractivo de este 'reboot' del fenómeno televisivo es que desde el principio te hace pillar la dinámica del chiste. Como si Seth Gordon se hubiera aprendido de memoria lo que Channing Tatum y Jonah Hill nos enseñaron en '21 Jump Street ', donde probaban por métodos científicos que la mala televisión no tiene por qué convertirse en una mala película. Bañadores rojos y risas aseguradas, con unas interpretaciones que hacen honor al absurdo del artefacto.
El elenco, liderado por Johnson, se completa con nombres como Zac Efron, que interpreta un nadador olímpico jubilado a quien todo el mundo conoce como el Cometa Vómito, así como Kelly Rohrbach y la Alexandra Daddario de 'True detective'. Cada segundo de metraje está salpimentado con ritmos techno que remueven la arena de la costa, y hacen que las olas se levanten unos cuantos metros.