La cueva de El Soplao es una cavidad situada en la sierra de Arnero, en Cantabria. Tiene 20 kilómetros de longitud total, aunque solo 4 están abiertos al público y, en su interior, hay formaciones geológicas como helíctitas (estalactitas que desafían la gravedad) y draperies (sábanas o banderas traslúcidas colgando del techo) de gran calidad que la convierten en una cavidad única a nivel mundial, a veces llamada ‘la capilla sixtina de la geología”.
La cueva está entre los municipios de Herrerías, Valdáliga y Rionansa, a una altitud de 540 m, rodeada de un entorno con espléndidas vistas sobre la Sierra de Peña Sagra, Los Picos de Europa, el valle del río Nansa y el Mar Cantábrico. Fue descubierta por los mineros que, hacia 1908, trabajaban en las minas cántabras. Por eso el acceso a la cueva se hace mediante una antigua vía del tren y con la recreación de un tren minero que años atrás utilizaban para acceder a las galerías.
La entrada general de la Cueva El Soplao cuesta 14 euros, pero el acceso es gratis para niños de 0 a 3 años y cuesta 11,50 € para los niños de 4 a 16 años, que deben ir acompañados.