1. Una posada del siglo XVI en Palma
Constantemente clasificado entre los mejores hoteles de Palma, la capital de la isla, Posada es un hotel boutique por excelencia. Ubicado en una casa señorial escondida del siglo XVI, el hotel combina la elegancia industrial con paredes de piedra originales y relajantes muestras de colores para crear un ambiente tranquilo. Hay solo 26 habitaciones, incluido un espacioso dúplex y una suite. En el desayuno, no os podéis perder el menú de huevos, que podréis elegir recién preparados al momento, junto con una variedad de especialidades de toda la isla. La terraza de la azotea tiene magníficas vistas, tumbonas modernas y una piscina pequeña para refrescarse en los meses más cálidos.