Los mejores restaurantes y cafés en Córdoba Capital para comer al paso

La utopía de hacer un viaje dentro de otro parece irreal, pero no. Grabeat es la materialización de eso: cualquier persona que visite la ciudad de Córdoba podrá viajar a otros rincones del mundo desde este pequeño local ubicado al borde de barrio Güemes. 

Hamburguesas al estilo americano, taquitos y quesadillas con picante, woks con salsa de soja y tamarindo, son algunas de las propuestas para los trotamundos de los sabores. Hay algunas mesitas si te querés quedar, pero qué mejor que disfrutar de unos taquitos en plena calle cordobesa.

El dato: probar los tacos de carnita y el arroz estilo mumbai.

Dónde está: Santiago Derqui 88, Nueva Córdoba.

La Cañada es quizás uno de los íconos que más identifican a la ciudad. Si bien a simple vista es un calicanto que contiene un arroyo, sus leyendas, su historia y su tipas de más de 70 años, le otorgan un encanto especial.

La Cañada tiene 4 kilómetros de largo y en su numeración 277 tiene una parada inesquivable: Pizza Madre, una ventanita en donde podés pedir y probar una de las mejores pizzas de la ciudad. Cada masa fermenta 48 horas en frío antes de ir al horno, lo que le da una textura esponjosa y muy sabrosa. Una buena Morada (mozzarella, cebolla morada, ciboulette y zest de limón) o una Queso Azul (salsa de tomate, mozzarella, queso azul, miel pura de Córdoba y parmesano) son buenas opciones.

El dato: si pasás de jueves a sábados pedí la Detroit, una pizza alta para compartir entre dos con borde de queso crocante.

Dónde queda: Marcelo T. de Alvear 277, Centro.

¿De Tucumán al mundo? Como si fuese una bandera que hay que enarbolar para conquistar corazones y paladares, Bullanga se instaló en pleno centro de Córdoba para demostrar lo que es un buen sándwich de milanesa tucumano.

Se trata de un plato simple, pero pretencioso. Y las pretensiones están en lo preciso de su receta y sus texturas. Un ejemplo: el pan que debe ser esponjoso sin ser pastoso y crocante, sin tener costra. Uno de los mayores logros de Bullanga. Hay opciones simples y completas, para carnívoros y vegetarianos.

Sin tener que pagar de más, podés escuchar unos tangos mientras esperás que te entreguen tu sandwich que, sin dudas, recordarás para siempre.

El dato: tenés que probar el sándwich completo y, si vas acompañado, la picadita con milanesas, conservas y escabeche.

Dónde está: Caseros 308, Centro.

Caminás por la Yrigoyen, una de las avenidas más lindas de la ciudad, sacás algunas fotos a la Iglesia de los Capuchinos, y luego te tomás unos minutos para comprar un cafecito en Caffé del Popolo, una de las cafeterías al paso “más chiquitas del mundo”.

Es una barra de cuatro metros cuadrados donde te reciben con café de especialidad, música italiana y opciones dulces y saladas para acompañar. Esta esquina tiene una arquitectura muy particular y está diseñada para que estudiantes, trabajadores y turistas puedan comprar su café y seguir viaje. En los próximos meses, inaugurará su propio tostador de café para que cada visitante pueda llevarse también un poquito de Caffé del Popolo a su casa.

El dato: probar el Iced Vaniglia Americano (ideal para los 40 grados del verano) y el  Matcha Latte.

Dónde está: Av. Hipòlito Yrigoyen 398, Nueva Córdoba.

El salón de este lugar parece infinito. Es que si bien es un lugar de comida “al paso”, está ubicado justo frente al Parque de las Tejas, uno de los más elegidos por los estudiantes de la ciudad. Quizás sea por eso o por la esponjosidad de sus focaccias, que se convirtió en uno de los más elegidos para quienes gustan comer y hacer otra cosa al mismo tiempo.

Tienen sándwiches en pan de focaccias, focaccias enteras o por porción y ensaladas. Podés comprar para llevar, comprar y comer en la única mesita que tienen afuera o comprar, cruzar la calle y disfrutar del parque.

El dato: si bien todos son un hit, te recomendamos especialmente el sándwich Mortal con mortadela con pistachos, queso danbo, tomate, albahaca y humus de berenjena. También, la focaccia de champis gratinados.

Dónde está: Bolivia 281, Nueva Córdoba.

Shawarma, falafel, empanadas y picaditas árabes también son parte de la carta “al paso” de la ciudad de Córdoba. Ubicado en pleno barrio Güemes, este “puestito” rescata las recetas de un personaje muy conocido, pero no identificado de la ciudad: “El Turco”, de quien al día de hoy se desconoce su cara. 

Los que visiten este lugar no sólo podrán tener un pedacito de sabor árabe en su paladar, sino también conocer de cerca el “humor” cordobés con su particular “choriwarma” (mezcla de choripán y shawarma) y varias frases célebres que decoran las paredes del local. Podés pedir para llevar o comer en las mesitas del lugar y jugar a adivinar quién es el famoso “Turco” del que todos hablan.

El dato: te recomendamos pedir para llevar el shawarma que sale calentito, abundante y con papas crujientes.

Dónde está: Fructuoso Rivera 240, Güemes.

Quizás sea la perlita de este listado. Se trata de un local chiquito con un par de mesas, comensales fieles y un boca en boca, que cada vez atrae más curiosos a pispear y probar una carta que es un viaje en sí mismo. Hay platos que se ven en las calles de pueblos y ciudades latinas como ceviche, kafta, tacos de Birria, entre otros.

La carta se actualiza por estación y los sabores cambian de acuerdo a la disponibilidad de la materia prima. Vinos jóvenes y de baja intervención son los acompañantes ideales. Si vas entre comidas podés disfrutar de un café en la vereda con una pepa con dulce de frutilla (de las mejores de Córdoba).

El dato: tenés que pedir los tacos de Birria de res con ají panca y chile rojo, y salsa yukateca con locoto y los buns de papa y hongos, con salsa picante de nueces.

Dónde está: Av. Pueyrredón 285, Nueva Córdoba.

Una barrita en plena Nueva Córdoba. Su slogan es: “Un café y seguimos…” y literal, es lo que sucede en los alrededores de este lugar que ya se convirtió en uno de los favoritos de locales y turistas. Un emprendimiento que surgió de la pasión de una pareja por el café y que hoy conquista corazones con sus “Galletazas”. Sí, mejor de lo que te imaginás: una taza de galletita que contiene café de especialidad. A esto se suman varias opciones para comer y tomar.

El dato: el combo perfecto para nosotros es pedir una galletaza de vainilla con un capuccino de avellanas.

Dónde está: Obispo Oro 321, Nueva Córdoba.

¿Pizza tipo napolitana o de molde? Esa pregunta podría abrir un sinfín de respuestas y argumentos a favor y en contra. Pero en este lugar no hay tiempo para discutir, sino solo para probar, saborear, intercambiar y disfrutar de las dos versiones de una de las comidas más populares del mundo.

Es una especie de ventanita con algunos banquitos para comer en el lugar. CRU es vecino de Oti, por lo que comparten el Parque de las Tejas como su salón. Tienen opciones clásicas como la “Fugazzeta” o “Muzza” y otras más jugadas como “Muchos quesos con miel”.

El dato: tenés que probar la pizza de lomo horneado y miel (salsa de tomate, lomo horneado, muzza y un toque de miel).

Dónde está: Bolivia 243, Nueva Córdoba.

Hasta este punto de la lista puede haber varias discusiones: quienes les guste o no el café, quiénes coman o no harinas. Pero llegamos al punto indiscutible porque, ¿a quién no le gustan los fiambres?

En Gata Maula la cosa es así: llegás, recorrés las heladeras repletas de fiambres de diferentes procedencias, colores y sabores; y elegís el que más te gusta: “Un poco de esto, de esto otro” y te llevás un sándwich como a vos te cope, como si en tu casa tuvieses todos los fiambres del mundo. Si bien lo podés acompañar con lo que quieras, la otra especialidad de este lugar son los vermouths. Al igual que los fiambres, tenés variedades para elegir. El paraíso de la gula o  el infierno de los indecisos.

El dato: si vas a picar algo mientras pateás la ciudad, te recomendaos pedir los conitos de fiambres y quesos.

Dónde está: Laprida 50, Nueva Córdoba.