Seguro que pasaste mil veces. Seguro que no lo viste. Este tesorito de la arquitectura de la Ciudad, está tan bien escondido como preservado. Si caminás por Retiro pasa desapercibido, pero vale la pena espiar. ¡Si ves luz entrá! Estamos hablando del Palacio Noel, en la calle Suipacha, a escasos pasos de la Avenida Libertador. Un edificio neocolonial que congregó a la vida social de la época en que Argentina era el granero del mundo, hoy alberga un restaurante secreto, con una carta en la cual los cereales son protagonistas. Pasado y futuro conviven en Los jardines de las Barquin.
Pasamos del otro lado de la hermosa puerta de madera trabajada -flanqueada por cuatro columnas- y todo es calma, naturaleza, y sabores. Aquí mismo funciona el Museo Fernández Blanco, que tras su restauración y con la apertura de su espacio gastronómico, está en su mejor momento para visitarlo.
Un patio andaluz que evoca a la tradición musulmana de la España medieval -con olivos, limoneros, un aljibe y una fuente que fue rehabilitada con cerámicas traídas de Sevilla- ahora también tiene un invernadero para detenerse a gozar de la mejor comida, firmada por los nombres más vanguardistas de la escena gastro actual. El creativo trío de chefs que forman Germán Sitz y Pedro Peña (Niño Gordo, La Carnicería, Chori) junto con Alejandro Féraud ( Alo's Bistro) expresa su potencial en este espacio sumamente original.