bodegones-mendoza
Gentileza Cámara de Turismo de Mendoza
Gentileza Cámara de Turismo de Mendoza

10 bodegones mendocinos para comer como lo hacían las abuelas

Te dejamos un recorrido con nuestros elegidos de Mendoza donde comer sabroso, sentirse como en casa y no gastar una fortuna.

Publicidad

En Mendoza, más allá de sus afamadas bodegas y paisajes de montaña ideales para practicar trekking y senderismo, hay un secreto bien guardado entre locales: los bodegones y cantinas de barrio. Esos lugares donde la cocina casera es la estrella, las porciones son generosas y el precio es justo. Sentarse en una mesa de mantel de papel, pedir una milanesa napolitana con papas fritas o unos ravioles con tuco y brindarle a la vida con un vino de la casa es parte del ritual.

Con platos abundantes, recetas de tradición y una impronta que mezcla lo familiar con lo bohemio, visitar un bodegón es adentrarse en la cultura local, a través de los sabores. Si querés vivir una experiencia gastronómica genuina, donde cada comida se acompaña con una buena historia y una copa de vino, este recorrido con 10 bodegones imperdibles es para vos.

1. Cantina Talleres

Milanesas gigantes, pastas caseras, empanadas bien mendocinas y un ambiente donde la tradición se mantiene viva. Ubicada dentro del Club Talleres Sport Club, en Godoy Cruz, esta cantina es un emblema barrial que resurgió con fuerza tras la salida de su anterior restaurante. Aunque está pensada principalmente para socios, sus puertas están abiertas a familias enteras que buscan platos abundantes y precios accesibles.

El espíritu de Andes Talleres Cantina se siente desde que uno cruza la puerta: un lugar que huele a comida casera, donde el bullicio de los comensales y el ir y venir de los mozos recuerdan a los bodegones de antaño. En su menú, las milanesas son un verdadero festín –según sus fieles clientes, pueden compartirse entre tres o cuatro personas–, pero también brillan las pastas, el asado y la tortilla de papas. Para los amantes de los sabores tradicionales, el menú del día siempre sorprende con opciones como locro, empanadas y postres caseros como budín de pan o flan.

El dato: sus empanadas tienen la fama de ser las mejores de Mendoza. Es tu turno de probarlas y descubrir si eso es verdad.

Dónde: Belgrano y Castellani, Godoy Cruz, Mendoza.

2. Cantina Entretiempo

Treinta años de historia, un asado impecable y un dueño que confía más en el boca en boca que en las redes sociales. Entretiempo, la cantina del Club Anzorena es un secreto bien guardado entre los mendocinos que saben dónde encontrar buena comida sin estridencias ni grandes publicidades. Alberto, el alma detrás de este bodegón, prefiere mantener su clientela fiel a través de platos abundantes y sabores de antaño, en un ambiente que invita a quedarse un rato más.

El asado es la estrella del menú, preparado con paciencia y oficio para que cada corte llegue a la mesa en su punto justo. Pero la oferta no se queda ahí: los lomos bien servidos, las milanesas generosas y las pastas caseras completan una carta sin pretensiones, donde cada plato es un homenaje a la cocina simple y bien hecha.

El dato: la cantina abre de lunes a lunes, y es atendida por Alberto, el encargado de realizar el asado, así que si te pedís carne, serás atendido por el mismísimo dueño, a quien le atribuye la fama del “mejor asador de Mendoza”.

Dónde: Suipacha 320, Mendoza.

Publicidad

3. Cantina de IMPSA

La Cantina de IMPSA ha sabido ganarse un lugar entre los mendocinos que buscan comida casera sin vueltas y con el sabor inconfundible de un bodegón de barrio. El menú no es extenso, pero cada plato que sale de la cocina es sinónimo de sabor y abundancia. Las milanesas y las pastas caseras son infaltables, pero los que buscan algo distinto pueden optar por la tabla de entraña, el matambre de cerdo a la pizza o los chorizos a la pomarola, especialidad de la casa. Las comidas siempre vienen con guarniciones generosas: papas, camote, ensalada mixta y arroz frío, asegurando que nadie se quede con hambre.

El ambiente es cálido y familiar, con ese bullicio característico de los lugares donde la comida es la protagonista. Abre de martes a domingo, convirtiéndose en una gran opción para compartir un almuerzo con amigos o en familia.

El dato: para ocasiones especiales como los días patrios, preparan platos criollos en tamaño XXL para compartir en familia o amigos y que nadie se quede sin probar.

Dónde: Alsina 2351, Godoy Cruz, Mendoza.

4. Cantina La Rambla

Con más de 21 años de historia, Cantina La Rambla honra a las raíces catalanas en Mendoza. La familia Collado, al frente del lugar, convirtió un espacio pequeño en un auténtico referente de la gastronomía española. En su carta, los clásicos dicen presente: la paella y la fideuá son los platos estrella, servidos con abundante marisco y un sabor que transporta directo a Barcelona. Para cerrar la experiencia, nada mejor que un postre bien tradicional como la crema catalana, con su inconfundible capa crocante de caramelo.

También te puede interesar: Nuevas aperturas gastronómicas en Mendoza

El ambiente es cálido y familiar, con recetas transmitidas de generación en generación que hacen que cada visita sea un viaje a España. Además, la cantina participa activamente en eventos culturales que refuerzan su identidad y su vínculo con la comunidad. Un rincón de Cataluña en Mendoza, donde la buena comida y la hospitalidad van de la mano.

El dato: sus paella y fideuá han sido celebradas incluso por chefs españoles que visitaron Mendoza. Gracias a la tradición de la familia Collado, muchos clientes aseguran que es el lugar donde se come la mejor comida española de la ciudad.

Dónde: San Juan 1436, Ciudad, Mendoza.

Publicidad

5. El Bodegón de Don Coco

En el Bodegón de Don Coco la historia comenzó con un local de metegoles que, con el tiempo, incorporó la cocina casera de Doña Lola, convirtiéndose en un punto de encuentro para vecinos y visitantes. La atención personalizada, donde los propios dueños y cocineros se acercan a las mesas para conocer la opinión de los comensales, ha sido clave en su éxito.

El menú refleja la esencia de la cocina criolla, con platos que evocan los sabores de antaño. Entre las especialidades se encuentran las milanesas con ensalada, el puchero, el pollo al horno y los tallarines caseros. Los postres tradicionales, como el flan con dulce de leche y el vigilante de queso y dulce de membrillo, son el broche de oro para una experiencia gastronómica completa.

El dato: aún conserva la tradición de servir sopa como entrada todos los días, como en las casas de antes. Recomendamos pedir platos con el fin de compartir ya que la generosidad también se refleja en las porciones.

Dónde: Félix Bogado 401, Mendoza.

6. La Tía Rada

La Tía Rada es mucho más que un bodegón: es una historia de esfuerzo, familia y tradición que se mantiene viva en cada plato. El legado comenzó con Marta Manrique, quien trabajaba en un restaurante hasta que los dueños, al quebrar, le ofrecieron quedarse con el negocio. Hoy, con 77 años, sigue al frente de la cocina como en sus comienzos.

El menú es simple y abundante, con clásicos bien mendocinos: milanesas, ravioles, tallarines y carne en todas sus formas. Por semana, en Tía Rada, se sirven 90 platos de ravioles, 50 de tallarines y más de 200 kilos de carne, en un ritmo de cocina que nunca se detiene.

El dato: Famosa por sus milanesas, En La Tía Rada se cocinan más de 200 kilos de nalga, una cifra que refleja la magnitud de su cocina y la fidelidad de sus clientes.

Dónde: 1290/1298/1352, Paso de los Andes, Godoy Cruz, Mendoza.

Publicidad

7. El Porvenir

En el corazón de La Consulta, con la imponente cordillera de Los Andes como telón de fondo, se encuentra El Porvenir, un bodegón que combina la tradición de la comida casera con la calidez de la atención personalizada. Ubicado en una imponente casona de esquina, este rincón gastronómico se ha convertido en un punto de encuentro para locales y visitantes que buscan disfrutar de platos abundantes en un ambiente cómodo.

El menú de El Porvenir destaca por su variedad y sabor. Entre las especialidades se encuentran las empanadas de carne jugosa, la tortilla de papas dorada y tierna, el lomo tierno y las albóndigas con puré cremoso. Además, ofrecen opciones vegetarianas como el cous cous con vegetales de estación y huevo a la plancha, demostrando su compromiso con una propuesta inclusiva para todos los paladares.

El dato: El Porvenir es producto del reconocido chef Nicolás Bedorrou, quien destaca por su participación activa en eventos gastronómicos locales en los cuales se presenta con creaciones que incorporan ingredientes regionales como el aceite de oliva y membrillo, resaltando los sabores autóctonos de la región.

Dónde: San Martín 102, San Carlos, Mendoza.

8. Al Rescoldo

Platos generosos, sabores caseros y porciones pensadas para compartir. En el corazón de Maipú, Al Rescoldo se ha consolidado como una de las mejores opciones para disfrutar de comida abundante y sin pretensiones, a pocos kilómetros de la Ciudad de Mendoza.

También te puede interesar: Entrevista a Vanina Chimeno, la chef y esposa de Francis Mallmann

El menú está diseñado para saciar incluso a los más hambrientos. Los lomos y milanesas, acompañados de guarniciones bien servidas, pueden compartirse entre dos o hasta tres personas, sin que nadie se quede con ganas de más. Para quienes prefieren platos individuales, hay un amplio surtido de pastas caseras y cortes de carne vacuna que llegan a la mesa en porciones que bien podrían ser compartidas.

El final dulce es otro punto fuerte del lugar. El flan clásico, el almendrado, el Don Pedro, el arroz con leche y los distintos sabores de helados cierran la comida con el mismo espíritu casero que define a este bodegón.

El dato: recomendamos tomar el Metrotranvía para llegar hasta Maipú, una experiencia única que te ahorrará tiempo y te permite tomar alcohol sin pensar en manejar. Además de recorrer la zona que brinda otras experiencias.

Dónde: Esquina España Asociación Española de Maipú, Ozamis 519, Maipú, Mendoza.

Publicidad

9. Coronel Rodriguez

Este bodegón de la Sexta Sección se ha ganado la fidelidad de quienes lo prueban una vez y no pueden dejar de volver. Lo primero que llama la atención son sus panes horneados, hechos en casa y con un sabor que los distingue de cualquier otro lugar. Ya sea en forma de pan pita para los lomos o como base para sus pizzas crocantes y bien servidas, los panificados son la esencia de su propuesta gastronómica.

El ambiente es relajado, siempre lleno de clientes que saben exactamente lo que quieren: una comida abundante, informal y sabrosa, perfecta para compartir con amigos o en familia. Ya sea para un almuerzo rápido o una cena sin apuros, Coronel Rodríguez es un punto de referencia para los amantes de la buena comida sin complicaciones.

El dato: recomendamos pedir una pizza de muzzarella para llevar y disfrutar de una experiencia tipo picnic en los jardines del Parque Central, a tres cuadras de la pizzería.

Dónde: Jorge A. Calle 200, Mendoza.

10. Almagro Cantina

En el corazón de Luján de Cuyo, se encuentra Almagro Cantina y Mercado, una propuesta gastronómica que combina la esencia de un bodegón tradicional con opciones saludables y contemporáneas. Ubicado dentro del complejo deportivo Boedo Camp, este espacio invita a los comensales a disfrutar de platos abundantes sin descuidar la salud, ofreciendo alternativas keto, vegetarianas y sin gluten.

El menú incluye desde pastas caseras como sorrentinos y fideos al huevo con estofado, hasta milanesas en diversas presentaciones, incluyendo opciones de berenjena para quienes prefieren alternativas vegetarianas. Las picadas para compartir y las ensaladas frescas también son protagonistas, adaptándose a diferentes gustos y necesidades alimenticias.

El dato: cuenta con un mercado donde los clientes pueden adquirir productos regionales, pastas frescas, fiambres, quesos y alimentos especiales como opciones keto y sin gluten, permitiendo llevar a casa un pedazo de la experiencia gastronómica.

Dónde: Boedo y lateral, Acceso Sur, Luján de Cuyo, Mendoza.

Recomendado
    También te gustará
    También te gustará
    Publicidad