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[title]La artista plástica Florencia Aise encuentra que a lo largo de su trayectoria han aparecido tres series que se repiten, aunque nunca son las mismas. Las uvas -propias de su tierra mendocina-, los retratos hiperrealistas -que han cobrado fama internacional- y los collages de mapas -que presentan materiales y soportes únicos, a medida que avanza la obra-. El proceso creativo es variable, asegura, aunque existe una serie de pasos que respeta cada vez que una pintura o un collage la mantienen sumergida.
Estudió Diseño Industrial en la UNCuyo, aunque ya de niña prefería las pinturas y los papeles, antes que los juguetes. En la adolescencia esta inclinación fue aún más marcada y desde entonces, a pesar de tomar algunos talleres, Florencia se preparó para un camino autodidacta. Autorretratos, murales, pinturas hiperrealistas de personalidades destacadas y políticos contemporáneos, la familia, los viñedos y los objetos conviven en esta hacedora del arte.
Por su técnica y su trabajo ha realizado numerosas exposiciones en galerías de Buenos Aires -la última fue en 2024 en Zurbarán-, y ferias internacionales con sede en Roma, Nueva York o el Art Basel Miami. Pintó a pedido, a Javier Milei, antes de que fuera elegido Presidente de la República Argentina, la Legislatura de Mendoza tiene retratos de gobernadores de su autoría y ha representado a la Argentina en viajes transformadores. La más reciente, en 2023, invitada por la Basu Foundation of the Arts, para exponer su obra y compartir sus conocimientos.
“Mi pintura es sobre todo hiperrealismo con óleos, pero a veces hago realismo y también collages. Según el galerista Champi Gutiérrez Zaldívar (hijo de Ignacio) soy tres pintoras en una. A mí eso me hace feliz porque siempre tuve la necesidad de experimentar con diferentes técnicas y procesos”, aclara.
Según el galerista Champi Gutiérrez Zaldívar (hijo de Ignacio) soy tres pintoras en una.
¿Cómo es tu proceso creativo?
Cada trabajo empieza siempre en mi cabeza, lo imagino, lo sueño, lo veo. El segundo paso es buscar más referencias, estudiar de dónde vino esa imagen y si existen obras parecidas. Y luego, la mayoría de las veces, boceto en la computadora o a mano para ver proporciones. Si es una pintura muy grande, hago cuadrículas para no perder la perspectiva. Comienzo con capas de pintura haciendo un dibujo simplificado y a medida que se seca, voy con las siguientes. Finalmente, dependiendo si la obra queda enmarcada o viaja enrollada, barnizo.
¿En qué etapa te sentís por estos días en relación a tu pintura y a los temas que aparecen?
Me encuentro en una etapa de reinvención, renovación y mucha introspección. El concepto de mi obra en general está en un stand by. Estoy viviendo muy conscientemente mi presente y redefiniendo mi futuro. El tema que sigue apareciendo, sobre todo, es dar vida y mostrar la esencia que percibo de las personas, como seres creadores y mensajeros a través de retratos. En este 2025 estoy trabajando con varias pinturas de caballos a pedido, que son muy significativos para sus dueños.
Me encuentro en una etapa de reinvención, renovación y mucha introspección.
¿Cómo es tu relación con el trabajo artístico y qué características tiene tu taller?
Mi taller está en mi casa y soy mamá full time, así que me sirve estar ahí para no perder tiempo de trabajo en traslados. Creo que en un par de años, cuando mis hijas sean más grandes, haré un gran taller. Trabajo generalmente todos los días y como esta es mi pasión, pintar es también un tiempo de descanso.
Como ésta es mi pasión, pintar es también un tiempo de descanso.
¿Dónde encontrás tus principales referencias e inspiraciones?
Tengo miles de referentes, de cada artista que admiro capto sus cualidades. Algunas en relación al oficio, otras por su filosofía y también admiro a quienes saben cómo llevar el arte a lugares impensados. Hay grandes artistas barrocas y renacentistas que me inspiran, como Artemisia Gentileschi o Sofonisba Anguissola, que fueron artistas a pesar de las represiones de género. Lo que más me inspira indudablemente son los colores y aprender. Eso implica viajar mucho para ir cambiando de color, paisaje, ciudad, religión y cultura. En definitiva, para conocer cosas nuevas.
Admiro a quienes saben cómo llevar el arte a lugares impensados.
¿Cómo surgieron las posibilidades de retratar a personalidades destacadas y a políticos como el presidente Javier Milei y otros gobernadores de Mendoza, como Rodolfo Suárez o Alfredo Cornejo?
Las oportunidades de pintar a gente conocida lega por mi trayectoria y también porque salgo a buscarlas. Yo no me quedo a esperar a que las cosas lleguen, se lo propongo a Dios y salgo a buscar esa oportunidad. Creo que nada es casualidad. En el caso de Milei fue un encargo que me hizo un empresario para regalárselo. Y en el caso de la Legislatura de Mendoza, cada vez que termina una gestión, se le pide a un artista que retrate al gobernador y al vicegobernador. En mi caso, llevo las dos últimas gestiones realizando estas pinturas.
Yo no me quedo a esperar a que las cosas lleguen, se lo propongo a Dios y salgo a buscar esa oportunidad.
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“Uva, Madre de Vino”: la exposición actual de la artista en Mendoza
En su muestra más reciente, que puede visitarse en la galería de arte de Park Hyatt Mendoza, Florencia Aise le rinde una vez más homenaje a la uva. Se trata de 25 pinturas que, según manifiesta, simbolizan parte de su identidad y sus orígenes. En cada racimo, la pintora descubre una vida que la asombra en un momento donde la Vendimia capta la atención provincial. “En esta exposición se entrelaza el arte con el ciclo vital de las uvas pero también con el vino. La uva es para mí un símbolo y una manera de rendirle culto a mi tierra”, comparte sobre esta muestra -sin fecha de cierre confirmada-.