Las brasas ya están encendidas, el chirrido de la carne es un hecho. La familia está reunida y, cuando el asador llama a la mesa, las copas se llenan para empezar el ritual. La mayoría optará por el vino aunque el termómetro esté rozando los 28 °C. Sin embargo, quizás algún valiente y curioso, elija sacar una latita de cerveza y probar cómo el calor de la carne recién salida de la parrilla y el frescor de una rubia helada ,se unen en un solo bocado.
La cerveza es una bebida que se impone en la mayoría de las heladeras cuando empieza este momento del año porque no hay nada como tomar algo fresquito mientras se disfruta de una buena comida. ¿Qué sucede si juntamos lo mejor de los dos mundos: un sabroso asado con una cerveza fría?
Si bien cada persona puede hacer las combinaciones que más les gusten, hay algunos tips o recomendaciones para poder maridar la cerveza con los diferentes cortes de carne que puede haber en un asado. Por ejemplo: las carnes rojas, y sobre todo las que llevan muchas horas de cocción, son perfectas para acompañar con una cerveza liviana, fresca y ligera como una Imperial Golden.
Si en la parrilla hay cortes de carnes blancas como matambre, chorizo o unas costillitas de cerdo, lo mejor es acompañar ese momento del asado con una Imperial Extra Lager que tiene notas frutadas y un sutil aroma a lúpulo. En Ley Primera, un restaurante tradicional con varias sedes en Buenos Aires (Pilar, Maschwitz y Tigre), el matambrito de cerdo con mucho limón o a la pizza es una de las estrellas del menú y también se puede acompañar con una cerveza helada (o dos ya que en Datazo, la plataforma de recomendaciones gastronómicas de Imperial, hay promociones 2x1).
Si en el asado hay verduras como hojas verdes y frescas o cocidas como espárragos se pueden maridar con una Imperial IPA. En Jimmy, un clásico restaurante de Rosario (Pichincha esquina Brown) podés disfrutar de una ensalada Caesar con pollo grillado, un maridaje perfecto para esta temporada.
En casa o en un restaurante, el asado puede también convertirse en una buena ocasión para ser creativos, desafiar a amigos o familia a probar algo nuevo y disfrutar del encuentro de sabores diferentes.